viernes, 28 de febrero de 2014

5 Opportunities you're missing on Linkedin









By Kevin Dau 

LinkedIn has become a regular part of business life.  But other than prospecting or recruiting, you may not be getting real value from this expansive resource.  Only about 16 percent of the people who are signed up use the premium service. And many profiles sit with minimal or outdated information.

 

LinkedIn is not a toy or even a social network.  It is a tool for you to grow yourself and your network. Even if you are not selling something or searching for employees, there are wonderful ways to use LinkedIn to grow your mind, your network and your business objectives.  But you have to proactively take the steps to get the value.  Here are 5 ways to do it.

 

Make yourself a desirable target. So many people put minimal information on their profile. I understand that not everyone is comfortable for self-promotion. But your profile should reflect not only your experience, but also your interests and your personality. The more detailed information you provide, the easier it is for people looking for someone like you will recognize you as someone worthy of their time. Make sure your profile is complete and shows attention to detail. If your picture, descriptions and activities are attractive and compelling, then other attractive people will be compelled to connect with you as well.

 

Build a peer group. Groups are useful, however many people involved in groups are either just quiet observers or rambling conversation hogs. Control the conversation.  Build and manage your own peer group that is information based. It sounds intimidating if you aren't a prolific writer, but here is how you do it. Create a list of 10 questions you wish you could answer in order to advance your mission. Form a group and send invites including those topics to others in your industry. Tell them you'll be covering these topics and ask them for input as well. In this way people will join you on a meaningful journey and keep the discussions valuable.

 

Relate in a personal way. I hate when I connect with someone and they immediately start pitching me.  In fact I generally mark their message as spam and disconnect right away. Just because LinkedIn is a networking site, doesn't mean that you have instant rapport with someone. Build personal relationships slowly and with intention. If you want to truly connect with powerful people, read their profiles carefully.  Go to their websites. Learn about them and find some common ground for a meaningful conversation. Figure out how you can share reciprocal value. The most valuable relationships--online or otherwise--don't happen overnight and are worth the time and effort.

 

Broaden your knowledge. LinkedIn is not just a tool for getting to know people; it's an incredible learning tool as well. I spent 25 years as a mortgage originator. I reviewed thousands of financial packages and learned much about how people spend both their money and their time.  I was able to see trends and gain an understanding of how people prioritize. LinkedIn doesn't have the financial info, but it is a massive treasure trove of data on how people manage their work, careers and industry.  Whether you want to drill down by exploring 20 profiles of Marketing VPs or find out about the longevity of petrochemical specialists, the data is there and easily searchable.  An hour a week exploring profiles and group discussions outside your purview will make you much more adept at seeing opportunities beyond your field.

 

Learn the tools. LinkedIn changes it up more than any other social media network. New features pop up and old ones go away. You may or may not find the value in premium services, but there are plenty of tools for free that are worthy of exploration.  But tools won't work by themselves. I love that LinkedIn spends millions of dollars to keep finding ways for you to do business better. Don't take this goldmine for granted. Show some appreciation by exploring their offering and providing feedback on the tools that you find most and least valuable. It takes some effort to stay on top of which ones are worth your while, but if you do, you'll be making better use of what it has to offer than 90% of the other users.


 


lunes, 24 de febrero de 2014

Business models generation



 



 

A business model describes the rationale of how an organization creates, delivers, and captures value.




 
The 9 building blocks:


1.  Customer segments, CS

2.  Value propositions,VP

3.  Channels, CH

4.  Customer relationships, CR

5.  Revenue streams, RS

6.  Key resources, KR

7.  Key activities, KA

8.  Key partnerships, KP

9.  Cost structure, C$

 

 

Alexander Osterwalder & Yves Pigneur

 

 

 





               

domingo, 23 de febrero de 2014

El Principio de la Pirámide

El Principio de la Pirámide de Barbara Minto es una técnica de pensamiento y comunicación jerárquicamente estructurada que se puede utilizar para preceder a una escritura estructurada. El Principio de la Pirámide de Minto asume que usted ya sabe escribir buenas oraciones y párrafos. Y se concentra en el proceso de pensamiento que podria preceder a la escritura.
 
La base del método de pensamiento de Minto es agrupar ideas en un presentador del proceso de pensamiento en pequeños racimos que soportan la tesis principal en un creciente detalle (granularmente). Vea el cuadro de la derecha. Los argumentos de soporte pueden estar basados en:
  • Razonamiento inductivo: el proceso de pensamiento en el cual las premisas de un argumento soportan la conclusión pero no la aseguran. Cada uno de los elementos en la fila dos de la pirámide contesta a una pregunta (e.g. porqué, cómo, cómo usted sabe) sobre la tesis encima de él. Se va de lo particular a lo general.
  • Razonamiento deductivo: proceso de pensamiento en el cual la conclusión es exigida por hechos previamente conocidos. Un elemento conduce lógicamente al siguiente. Se va de los general a lo particular.
La mejor manera de hacer cualquier punto o argumento, dice Barbara, es estructurar el pensamiento de esta manera.

El método explica cómo utilizar el marco SCQ (situación, complicación, pregunta, respuesta) para determinar exactamente laidea que usted desea comunicar y el orden en el cual usted debe hacer sus puntos:
  • Una situación común es que los trabajadores del conocimiento deben producir rápidamente un texto sobre un tema complejo.
  • Un ejemplo de una complicación de la situación antes dicha es que los creadores de estos textos tienen una tendencia a salirse de su trayectoria. Además tienen un tiempo limitado de tiempo. Y los lectores odian los informes voluminosos.
  • La pregunta entonces se convierte en: ¿cómo hacer informes breves, concisos y claros en un marco temporal corto?
  • La respuesta es la técnica proporcionada por Minto.

ORIGEN DEL PRINCIPIO DE LA PIRÁMIDE. HISTORIA

Barbara Minto desarrolló el Principio de la Pirámide de Minto gracias a sus trabajos iniciales como consultor en McKinsey & Company, inc.

USO DEL PRINCIPIO DE LA PIRÁMIDE. APLICACIONES

La técnica es más útil para aquellas personas en una organización que deben escribir los documentos analíticos, sobre la base de los cuales la alta gerencia debe tomar decisiones. Probablemente la alta gerencia se queja de que les toma demasiado tiempo encontrar los puntos de su interés. El modelo se aplica a cualquier tipo de escritura en la cuál el propósito sea presentar su pensamiento al lector - a partir de notas nemotécnicas de 1 página a informes de 50 páginas o a libros de 300 páginas, desde una presentación de slides simple a una exposición multimedia. En todos estos casos, ayuda a su usuario:
  1. Piense creativamente, razone lúcidamente, y exprese las ideas con claridad.
  2. Defina los problemas complejos y establezca los objetivos de cualquier documento.
  3. Determine las ideas y reconozca su importancia relativa.
  4. Estructure el razonamiento en una discusión coherente y transparente.
  5. Analice el argumento para confirmar su eficacia.

PASOS EN EL PRINCIPIO DE LA PIRÁMIDE. PROCESO

Hay varios componentes para el método completo:
  1. Construya la pirámide de Minto.
  2. Estructure las ideas a ser comunicadas dentro de la “situación, complicación, pregunta, marco de la respuesta” (SCQ).
  3. Cree los resúmenes obligatorios y la listas de items.
Con respecto al libro publicado por Barbara Minto (el Principio de la Pirámide de Minto), hay cuatro secciones totales de estudio:
  • La primera parte explica la necesidad de agrupar y resumir ideas dentro de una pirámide bajo una sola idea dirigida a responder una sola pregunta. También muestra cómo utilizar ese entendiendo para encontrar la pregunta de su lector y estructurar sus ideas para contestarla. Comenzando con el marco SCQ.
  • La segunda parte informa cómo ver críticamente dentro del detalle de su pensamiento. De esta manera usted puede cerciorarse de que las ideas que usted ha incluido sean relevantes y completas. Y también usted puede verificar que sus puntos resumidos reflejan realmente las distintas interiorizaciones inherentes a cada uno de los distintos grupos de ideas.
  • La tercera parte explica cómo utilizar una variedad de marcos de trabajos analíticos para estructurar su análisis en las varias etapas del proceso de resolución de problemas. De esta manera los resultados del análisis pueden ser en efecto previamente organizados y así calzar fácilmente en la estructura de la pirámide.
  • La cuarta parte discute las técnicas para cerciorarse que la estructura de la pirámide no pierde al lector mientras que usted transfiere sus ideas desde la pirámide, a la prosa escrita o a los slides de una presentación oral.

FORTALEZAS DEL PRINCIPIO DE LA PIRÁMIDE. BENEFICIOS

  • Reduce el tiempo que es normalmente necesario para elaborar un primer bosquejo.
  • Aumenta su claridad.
  • Disminuye su longitud.
  • El resultado total del método es que las ideas saltan de la página, a la mente del lector. Con un esfuerzo mínimo de parte del lector.

LIMITACIONES DEL PRINCIPIO DE LA PIRÁMIDE. DESVENTAJAS

  • Requiere una gran disciplina para aprender y aplicar los métodos constantemente.
  • Algunos críticos dicen que el libro original hace poco menos que obligar la noción de la necesidad de tomarse el tiempo para utilizar los métodos.

sábado, 22 de febrero de 2014

30 cosas que debes dejar



1. Deja de gastar el tiempo con las personas equivocadas. - La vida es demasiado corta para pasar tiempo con personas que te quitan la paz y la felicidad. Si alguien te quiere en su vida, harán espacio para ti. No deberías tener que luchar por un lugar. Nunca, nunca insistas en alguien que constantemente pasa por alto tu valor. Y recuerda, no es la gente que está a tu lado en tu mejor momento, sino los que están a tu lado en tu peor momento, tus verdaderos amigos.  Como dijo John F. Kennedy: El éxito tiene muchos padres, pero el fracaso es huérfano.

2. Deja de huir de tus problemas. - Enfréntalos con la cabeza en alto. No, no será fácil. No hay persona en el mundo capaz de manejar a la perfección cada golpe que le arrojan.  No se supone que somos capaces de resolver problemas al instante. Así no es como estamos hechos. De hecho, somos débiles y podemos enojarnos, ponernos tristes, sentir dolor, tropezar y caer. Enfrentar los problemas, aprender, adaptarse y resolverlos en el transcurso del tiempo. Esto es lo que en última instancia, nos convierte en la persona que llegaremos a ser.

3. Deja de mentirte a ti mismo. – Puedes mentirle a cualquiera en el mundo, pero no puedes mentirte a ti mismo. Nuestras vidas mejoran solamente cuando tomamos las oportunidades, y la primera y más difícil oportunidad que podemos tomar es ser honestos con nosotros mismos.

4. Deja de poner siempre tus propias necesidades en un segundo plano– La cosa más dolorosa es perderte a ti mismo en el proceso de amar a alguien demasiado (tu pareja, tus padres, tus hijos, tus hermanos), y olvidar que también eres especial. Sí, ayuda a los demás, pero ayúdate a ti mismo también.  

5. Deja de intentar ser alguien que no eres. - Uno de los mayores desafíos en la vida es ser tú mismo en un mundo que está tratando de hacerte igual a todos. Siempre habrá alguien más guapo, siempre habrá alguien más inteligente, siempre habrá alguien más joven, pero nunca serán tú. No cambies para gustarle a la gente. Sé tú mismo y a las personas correctas les encantará el verdadero tú.

6. Deja de aferrarte al pasado. - No puedes comenzar el siguiente capítulo de tu vida si sigues releyendo el anterior.

7. Deja de tener miedo a cometer un error. - Hacer algo y hacerlo mal es por lo menos diez veces más productivo que hacer nada. Cada éxito tiene una estela de fracasos detrás de él, y cada fracaso está conduciendo hacia el éxito. Terminas lamentando las cosas que no hiciste mucho más que las cosas que hiciste.

8. Deja de reprenderte por los errores del pasado. - Se puede amar a la persona equivocada y llorar por las cosas equivocadas, pero no importa cómo las cosas van mal, una cosa es segura, los errores nos ayudan a mejorar y encontrar a la persona y las cosas que son perfectas para nosotros. Todos cometemos errores, tenemos luchas, e incluso lamentamos las cosas en nuestro pasado. Lo importante es aprender de ellos y no solo lamentarnos.

9. Deja de intentar comprar la felicidad. - Muchas de las cosas que deseamos tienen precio y pensamos que al adquirirlas vamos a ser felices.  Pero la verdad es que las cosas que realmente nos satisfacen son totalmente gratis – la familia, el amor, la risa, los amigos, la satisfacción del trabajo bien hecho.

10. Deja de delegar en tu pareja tu felicidad. - Si no estás feliz con lo que eres por dentro, tampoco serás feliz en una relación a largo plazo con nadie.  Tienes que crear la estabilidad en tu propia vida antes de poder compartirla con alguien más.

11. Deja de ser inactivo. - Evalúa las situaciones y toma medidas decisivas.  No puedes cambiar lo que te rehúsas a confrontar. Avanzar implica un riesgo. ¡Punto! No puedes llegar a la segunda base con el pie en la primera.

12. Deja de pensar que no estás listo. - Nadie se siente 100% listo cuando surge una oportunidad.  Las oportunidades más grandes en la vida nos obligan a crecer más allá de nuestras zonas de confort.

13. Deja de involucrarte en relaciones por las razones equivocadas. - Las relaciones deben ser elegidas con prudencia. Es mejor estar solo que estar mal acompañado. No hay necesidad de precipitarse. Y esto se puede trasladar a todo tipo de relación, ya sea personal, laboral o profesional...  Pero enamórate cuando estés listo, no cuando estés solo.

14. Deja de rechazar nuevas relaciones sólo porque las antiguas no funcionaron. - En la vida te darás cuenta de que hay un propósito para todos los que conoces.  Algunos te pondrán a prueba, algunos te utilizarán y algunos te enseñarán. Pero lo más importante, algunos sacan lo mejor de ti.

15. Deja de intentar competir contra todos los demás. - No te preocupes por lo que otros hacen mejor que tú. Concéntrate en vencer tus propios records cada día. El éxito es una batalla entre tú y tú mismo solamente.

16. Deja de estar celoso de los demás. - Los celos son el arte de contar las bendiciones de otra persona en lugar de las tuyas propias. Pregúntate lo siguiente: “¿Qué es algo que yo tengo y que todos los demás quieren?

17. Deja de quejarte y sentir lástima por ti mismo.  Las curvas de la vida existen por una razón. No puedes ver o entender todo lo que ocurre en un momento. A menudo verás que con el tiempo te llevaron a un mejor lugar, persona, estado de ánimo o situación. Así que¡sonríe!

18. Deja de guardar rencores. - No vivas tu vida con odio en tu corazón. Vas a terminar perjudicándote a ti mismo más que a la gente que odias. El perdón no está diciendo: Lo que me hicieron está bien., está diciendo: Yo no voy a dejar que se arruine mi felicidad cada vez que te vea.

19. Deja de permitir que otros te bajen a su nivel.  Niégate a bajar tus estándares para dar cabida a aquellos que se niegan a elevar los suyos propios.

20. Deja de perder el tiempo explicando a los demás. - Tus amigos no lo necesitan y tus enemigos no van a creer de todos modos. Sólo haz lo que sabes que agrada Dios, y punto.

21. Deja de hacer las mismas cosas una y otra vez sin descanso. - El momento para tomar un profundo respiro es cuando no tienes tiempo para ello. Si sigues haciendo lo que estás haciendo, seguirás consiguiendo lo que estás recibiendo. Si quieres mejorar, a veces es necesario tomar distancia para ver las cosas con claridad.

22. Deja de pasar por alto la belleza de los pequeños momentos. - Disfruta de las pequeñas cosas, porque un día puedes mirar hacia atrás y descubrir que en verdad eran las cosas grandes.

23. Deja de hacer las cosas a medias. - Seguirás siendo del montón, nunca te diferenciarás de nadie. Lucha por sobresalir, por la virtud, por hacer lo mejor y dar lo mejor. Ni una pizca menos.

24. Deja de seguir el camino de menor resistencia. - La vida no es fácil, especialmente cuando se piensa en lograr algo que vale la pena. No tomes el camino más fácil. Haz algo extraordinario.

25. Deja de actuar como si todo está bien si no lo está.  Está bien desmoronarse por un rato. No siempre tienes que pretender ser fuerte, y no hay necesidad de demostrar constantemente que todo va bien. Llora si es necesario, pero reconoce y acepta dónde estás. Cuanto antes lo hagas, más pronto serás capaz de sonreír de nuevo.

26. Deja de culpar a otros por tus problemas. - La medida en que puedes alcanzar tus sueños depende de la medida en que tomas la responsabilidad de tu vida. Al culpar a otros de lo que está pasando, niegas tu responsabilidad  le das a otros poder sobre esa parte de tu vida.

27.  Deja de intentar ser todo para todos.  Hacerlo así es imposible y al intentarlo sólo te quemarás. Sin embargo, hacer sonreír a quienes te rodean puede cambiar el mundo. Tal vez no a todo el mundo, pero sí su mundo. Así que afina tu objetivo.

28. Deja de preocuparte tanto.  Preocuparte no te liberará de las cargas de mañana, sino que te alejará de la alegría que tiene el día de hoy. Una forma de comprobar si hay algo sobre lo que vale la pena preocuparte es hacerte la siguiente pregunta: “¿Este asunto tiene solución? Si la respuesta es afirmativa... ¡de qué te preocupas!. Y si la respuesta es negativa... ¡de qué te preocupas!

29. Deja de centrarte en lo que no quieres que suceda. - Concéntrate en lo que sí quieres que suceda. El pensamiento positivo está a la vanguardia de cada gran historia de éxito. Si te despiertas cada mañana con la idea de que algo maravilloso va a suceder en tu vida hoy, y prestas mucha atención, a menudo te darás cuenta de que tienes razón.

30. Deja de ser ingrato. - No importa cuán bien o mal lo pasas, despierta cada día agradecido por tu vida, de lo que tienes y de lo que no tienes. ¿Sabías que hay millones en el mundo que anhelan estar donde tú estás y tener lo que tú tienes?


martes, 11 de febrero de 2014

Habits of highly effective speakers

By Bill Murphy, Inc.


Whether you're giving a wedding toast or an address to thousands, here are key practices from the best public speakers in history.

 

They are authentic.

Many advisors will tell you to open a speech with a joke, but that's not always good advice, especially if your persona or the subject of your speech doesn't readily lend itself to humor. It's far more important to strive for authenticity, and connection. This is why President George W. Bush's short speech in 2001 at Ground Zero resonated in a way his prepared remarks never could. Also, have you watched the beautiful speech that Malala Yousafzai gave at the United Nations last year? Pitch perfect.

They choose phrases carefully.

A speech is prose, but a great speech is marked by moments of poetry. Think of Martin Luther King, whose "I Have a Dream" speech includes that phrase in nine succinct paragraphs. Sir Winston Churchill didn't just ask his countrymen to battle the Germans,he exhorted them to "fight them on the beaches ... [and] fight them on the landing grounds..." Ronald Reagan was a master of this tactic too, from the memorable "Shining City on a Hill" speech to the one he gave about the Berlin Wall. Make your speech more memorable by mastering language tools like alliteration, cadence, rhythm, repetition, and rhyme.

They keep it short.

President Bill Clinton was first introduced to most of America at the 1988 Democratic National Convention, where he gave an interminable, 33-minute grind that showed none of his later rhetorical flourish. His biggest applause line? "In conclusion." He should have taken a lesson from Abraham Lincoln, whose Gettysburg Address ran only 270 words. For reference, this column is about three times as long. The best speeches leave audiences thinking, "I'd like to hear more." So don't tell them you'll "be brief," just do it.

They rewrite. And they rewrite some more.

A great speech is never quite done until it's delivered. Take a look, here, at the final typed draft of President Franklin Roosevelt's speech to Congress the day after the attack on Pearl Harbor. Had he not reworked it just before delivery, we'd quote it now as calling December 7, "a date that will go down in world history." Rememeber, anything decent that's ever been published has gone through numerous rewrites. If you haven't read this slightly profane quote by Ernest Hemingway about first drafts, do so now and take it to heart.

They build rapport.

Early in his political career, Churchill began speeches by saying absolutely nothing, sometimes for long, agonizing minutes. His audiences would worry he might be petrified, unable to continue, or ready to faint from stage fright. Thus when he finally spoke, the room was on Churchill's side and relieved, at least, not to watch an embarrassing meltdown. Don't forget that a speech is about you as much as your ideas. Find a way to get the audience rooting for you, even if they don't agree with what you have to say.

They tell stories.

Great stories have a beginning, a middle, and an end. It has compelling characters, a challenging plot, and worthy themes. The best ones connect with some larger message. A decade ago, then-Senate candidate Barack Obama knew all of this. His first speech of national prominence, given at the Democratic National Convention in 2004, was a masterful intertwining of his personal life story with the story of America. So go ahead, take your audience on a narrative journey. Just make sure it knows you have a roadmap.

They organize.

In 2005, Steve Jobs gave the graduation speech at Stanford University, and delivered one of the best commencement  addresses of all time. He employed many of the best practices we've already seen, and set the tone from the beginning, promising his audience:

Today I want to tell you three stories from my life. That's it. No big deal. Just three stories.

When I work with ghostwriting clients on speeches, I always ask them to watch this speech

They practice.

Experts advise practicing important speeches in sections, although it's even better to practice before an audience, if you can. As a former trial and appellate attorney for the U.S. Government, I learned that smart lawyers practice arguing repeatedly in front of colleagues, before they go to court (a technique known as, mooting). Political candidates and champion debaters go through rounds of rough-and-tumble dress rehearsals in order to give their final performances a better shot at success as well.

They learn from the masters.

No matter how good your speech is, I can guarantee this: Someone else has done it before. And probably better. So, why not make it part of your preparation to read and watch five or 10 of the most remarkable speeches in history? If you need help getting started, consider the most popular TED Talks or even some of the best (and worst) Academy Award acceptance speeches. Also check here, here, and here for more inspiration.



lunes, 10 de febrero de 2014

El lobo de Wall Street


 
"Elogio del estafador", de Santiago Roncagliolo

a 

Recuerdo perfectamente Uno de los nuestros (Goodfellas), la pelícu­la de Martin Scorsese sobre el ascenso y caída de un hampón. Más de veinte años después de su estreno, tengo memorizada la escena en que Ray Liotta aspira cocaína con fondo musical de Sunshine of your love. Y el divertido momento del cadáver en el maletero que, sorpresa, aún vive. Y el gran final, cuando Liotta se acoge a un programa de protección de testigos y termina convertido en un triste vecino aburrido más.

Salí de esa película pensando: “Yo quiero ser mafioso. Por favor, Dios, si existes, hazme mafioso”.

Scorsese lo ha vuelto a hacer con su última película: El lobo de Wall Street, basada en la vida real del bróker Jordan Belfort. Los grandes delincuentes de hoy día no llevan armas de fuego, sino hipotecas subprime. Y no te amenazan con volarte los sesos, sino con opciones de compra preferente. Pero lo de la cocaína no ha cambiado (hay tradiciones tan arraigadas como la Navidad). Así que esta vez, el protagonista de la película no es un maleante, sino un corredor de Bolsa estafador.

Y, sin embargo, el humor negro de la película es el mismo que en la vieja Goodfellas: en una orgía de excesos, el protagonista se mete todas las drogas posibles en los momentos más inoportunos. Contrata cantidades industriales de prostitutas. Juega al tiro al blanco con enanos. Conduce un helicóptero borracho. Todo esto contado con un cinismo que arranca carcajadas y con una banda sonora sin desperdicio (inolvidable Gloria, de Umberto Tozzi, en el rescate de un lujoso yate partido por la mitad).

En consecuencia, uno sale de la película pensando: “Quiero ser corredor de Bolsa. Dios, si me haces corredor de Bolsa, te daré un 20% de los beneficios”.

Como era de esperar, este retrato cómico de la depravación capitalista ha levantado una gran polémica. Miembros de la Academia de Hollywood y víctimas del Belfort de la vida real se han escandalizado públicamente. La actriz Hope Holiday consideró a la película “basura repugnante”. La hija de un bróker delatado por Belfort acusó a Scorsese de ser “aliado de un criminal”.

Según estas personas, Jordan Belfort era un ser humano repulsivo, y el cine debería mostrarlo como tal. Sus aventuras no deberían parecer divertidas, porque eso sugiere que sus actos fueron tolerables, e incluso puede animar a otras personas a imitarlo.

Debo decirles a los detractores de El lobo de Wall Street que pueden estar tranquilos: después de ver Goodfellas, yo no me hice mafioso. Como la mayor parte de los espectadores, sentí cómo el poder desmedido y arbitrario destruye también al que lo ejerce. Hice una pequeña reflexión y otro día vi otra película. Hasta donde sé, tampoco los espectadores de El lobo de Wall Street se han hecho automáticamente corredores de Bolsa.

Lo que sí consigue Scorsese, tras las carcajadas, es hacerte notar que el energúmeno de Belfort fue un éxito, porque se alimentó de un sistema financiero que premiaba a gente como él. Su historia es una feroz crítica a una sociedad que ha convertido el dinero en una droga más, una denuncia a la hipocresía de una cultura que sólo te mide por el peso de tu chequera.

Los detractores de la película creen que los espectadores no entenderán eso. Que las inocentes cabecitas del público son manipulables, y todos saldremos corriendo del cine a aspirar cocaína en el trasero de prostitutas. Absurdo, pero no nuevo. También ha habido Gobiernos decididos a proteger a la gente de su propia “inocencia”; por ejemplo, el III Reich. Hitler mandó quemar cuadros licenciosos y libros llenos de historias inmorales. Y ya sabemos cuánto mejoró su sociedad con eso.

Aristóteles decía: “El arte imita a la vida”. El cine es arte: un espejo del ser humano, con sus virtudes y defectos, que nos ayuda a entendernos mejor. Quien debe darnos miedo no es el artista, sino quien cree que somos bobos, y que hay que protegernos de nosotros mismos. Ese es, si lo dejamos suelto, el verdadero lobo.

sábado, 1 de febrero de 2014

Política Monetaria durante Bernanke


John B. Taylor, Profesor de Economía de la Universidad de Stanford.


Al igual que a muchos economistas monetarios, recientemente he sido contactado por los reporteros y comentaristas para decir unas pocas palabras acerca de la política monetaria en tiempos de Ben Bernanke al frente de la Reserva Federal. Ya en diciembre la oficina de Washington del Wall Street Journal me pidió a mí y a otros que escribieramos una breve declaración de 300 palabras sobre el tema. Aquí están las 300 palabras:

 

Muchos recordarán a Ben Bernanke por las acciones clásicas de estabilización de los bancos centrales tomadas durante el pánico del otoño de 2008, incluidos los préstamos de emergencia a los bancos y las líneas de swap con bancos centrales extranjeros. Pero los historiadores también podrían considerar medidas que la Fed tomó antes y después del pánico.

 

Durante 2003-2005, poco después de la llegada de Ben Bernanke apoyó al Consejo al subrayar las preocupaciones deflacionarias, pero la Fed se embarcó en una política de tasas de interés muy bajas. La política fue “racionalizada” en parte por estas preocupaciones deflacionarias, pero era una desviación de una política que había funcionado bien durante dos décadas, y exacerbó el auge de la vivienda y la condujo a la toma excesiva de riesgos.

 

El surgimiento de los impagos se inició en 2006. Pero la Fed diagnostica mal los golpes resultantes de balances de los bancos como un problema de liquidez pura, y su tratamiento inicial - vertiendo fondos en el mercado interbancario a través de la Term Auction Facility 2007 - hizo poco bien. La Fed luego siguió con una política en -otra vez- de un nuevo plan de rescate que creó más inestabilidad. Cuando la Fed rescató a los acreedores de Bear Stearns en marzo de 2008 los inversionistas asumen que los acreedores de Lehman Brothers serían rescatados también. Cuando no lo hicieron, fue una gran sorpresa. Con esta incertidumbre en la política alcanzando estos niveles, cundió el pánico.

 

Tras el pánico, la Fed comenzó a disminuir los préstamos de emergencia, pero luego se embarcó en una política totalmente sin precedentes - compras masivas de valores respaldados por hipotecas y del Tesoro, conocido como flexibilización cuantitativa (QE). La economía ha crecido lentamente con QE en comparación con recuperaciones anteriores sin QE y muy por debajo de las predicciones de la Reserva Federal. Muchos argumentan que la QE no ha reducido el desempleo, pero ha disminuido la independencia y la credibilidad de la institución, lo que ha opacado los efectos de la adopción de una meta de inflación numérica. Ahora, sólo un año después del comienzo de la última ronda de QE, la Fed está luchando con la forma de dar marcha atrás como muchos lo habían advertido.